León.- Aficionados del León entraron a la fuerza a las oficinas del Estadio Nou Camp, para protestar por la entrega del inmueble al empresario Roberto Zermeño.
A las 8 de la mañana, un grupo de 20 aficionados empujaron la puerta principal del Estadio, que no tenía candados. Dos guardias de seguridad privada trataron de impedir la entrada de los seguidores, pero nada pudieron hacer y se alejaron del lugar.
Los aficionados gritaron mensajes contra Roberto Zermeño y al llegar a las oficinas, lanzaron piedras, botes de basura y palos.
Rompieron uno de los cristales de la oficina y al ver que la reja estaba abierta, entraron a la recepción.
También pudieron bajar por el túnel hacia la cancha del Nou Camp y desde ahí lanzaron más gritos contra Zermeño. Tras 10 minutos, los aficionados salieron caminando.
Nunca aparecieron policías municipales o elementos de la Guardia Nacional, que sí respaldaron la entrada de los representantes legales de Roberto Zermeño.
El empresario leonés se presenta como propietario del estadio y pretende tomar posesión física del inmueble, aunque no está claro si eso obligará al equipo León a buscar otra casa.
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